Jesús, en Ti confio

De acuerdo a las indicaciones de Nuestra Amada Madre, la Virgen María, en el mensaje del 01-12-2013, Madre de la Salvación 

Para ver el mensaje completo con las indicaciones de Nuestra Madre para hacer la Novena,  click en imagen

Esta es la oración; Cruzada de Oración (130) 
que debéis decir  cada uno de los siete días, 
(3 veces al día por las mañanas)

Cruzada de Oración (130)
 Novena de Salvación:

Mi amada Madre de la Salvación, por favor obtén para todas las almas, el Don de la Salvación Eterna a través de la Misericordia de tu Hijo, Jesucristo.

Mediante tu intercesión, suplico que tú ores para liberar a todas las almas que están en esclavitud de Satanás.

Por favor, pide a tu Hijo mostrar Misericordia y perdón para aquellas almas, que Lo rechazan, que Lo lastiman con su indiferencia y que adoran la doctrina falsa y dioses falsos.

Te imploramos Madre querida, que pidas por las Gracias para abrir los corazones de las almas que más necesitan de tu ayuda. Amén.


Tarjetita autorizada, para hacer copias y repartir 



lunes, 30 de marzo de 2015

Deseo que todos Mis seguidores lleven a cabo un tiempo de ayuno a partir del próximo lunes hasta las 15:30 horas del Viernes Santo.

Viernes 22 de marzo, 2013 a las 21:45 hrs.

Mi amadísima hija, deseo que todos Mis seguidores lleven a cabo un tiempo de ayuno desde el próximo lunes hasta las 15:30 horas del Viernes Santo.

Hasta una pequeña muestra de ayuno cosechará, para todos ustedes, un conocimiento de Mi Plan de Salvación y cómo pueden ayudarme a salvar las almas de los pecadores.

Es a través del ayuno que se volverán sanos de nuevo. Por la limpieza de su cuerpo, su espíritu será renovado. También deseo que reciban el Sacramento de la Confesión, o la forma de reconciliación que está disponible para ustedes. Por favor, si no pueden recibir este Sacramento, acepten el Don que les he dado de Mi Indulgencia Plenaria, hace algún tiempo.

Martes 31 de enero, 2012 a las 21:30 horas

Deben decir esta oración por 7 días consecutivos y les será dado el Don de la absolución total y el poder del Espíritu Santo:

“Oh mi Jesús, Tú eres la Luz de la Tierra. Eres la llama que toca todos los corazones. Tu misericordia y amor no conocen límites. No somos dignos del sacrificio que hiciste con Tu muerte en la cruz. Sin embargo sabemos que Tu amor por nosotros es mayor que el amor que tenemos por Ti Concédenos, Oh Señor, el don de la humildad, para que así seamos merecedores de Tu Nuevo Reino. Llénanos con el Espíritu Santo, para que así podamos marchar hacia adelante y guiar a Tu ejército para proclamar la verdad de Tu Santa Palabra y prepara a nuestros hermanos y hermanas para la Gloria de Tu Segunda Venida a la Tierra. Te honramos. Te alabamos. Nos ofrecemos a nosotros mismos, nuestras penas, nuestros sufrimientos, como una ofrenda a Ti para la salvación de las almas. Te amamos Jesús. Ten Misericordia de todos Tus hijos donde sea que estén. Amén.”

Luego, en espíritu, deseo que se unan conmigo, como si estuvieran presentes con Mis apóstoles en Mi Última Cena. Compartirán conmigo, el pan sin levadura y comerán conmigo en Mi mesa. Ustedes, Mis seguidores, pueden compartir conmigo, Mi Copa de Sufrimiento, por su propia voluntad, si es que aceptan Mi ofrecimiento.

Si pueden aceptar esto, ustedes, como propiciación por los pecados de los hombres mortales, salvarán millones de almas. Concederé Misericordia para los pecadores más endurecidos, a cambio de su Don de sufrimiento.

Esta es la Cruzada de Oración para ustedes, si desean compartir Mi Copa de Sufrimiento. Recítenla, tres veces, cuando puedan, pero preferiblemente durante cualquier tiempo de ayuno.


Cruzada de Oración (103) Oración para compartir la Copa de Sufrimiento con Cristo.


"Me pongo delante de ti, querido Jesús, y a Tus pies para que hagas lo que quieras conmigo por el bien de todos.

Permíteme compartir Tu Copa de Sufrimiento.
Toma este regalo de mi parte, de modo que puedas salvar a aquellas pobres almas que están perdidas y sin esperanza.
Tómame, en cuerpo, para que pueda compartir Tu dolor.
Toma mi corazón en Tus Manos Sagradas y trae a mi alma en unión Contigo.
A través de mi don del sufrimiento, permito a Tu Presencia Divina que acoja mi alma, para que puedas redimir a todos los pecadores y una a todos los hijos de Dios por siempre y para siempre. Amén”.

Este sacrificio de su parte, presentado a Mí, Jesucristo, Redentor de toda la humanidad, me permitirá derramar Mi Gran Misericordia sobre el mundo entero.

Mas importantemente, voy a salvar incluso a los que me aborrecen. Sus oraciones y sacrificio son su única gracia salvadora, porque sin esto, serían destruidos por el maligno.

Si desean soportar este sufrimiento, les concederé grandes bendiciones y les pido que continúen Conmigo en Mi travesía para despertar al mundo de su letargo y así poder levantar el velo del engaño que lo cubre.

Su Jesús